El líquido de refrigeración no es un elemento presente en todos los servomotores. Realmente son pocos los que disponen de circuito de refrigeración, lo habitual es utilizarla para husillos, spindles o electromandrinos. Pero cuando la refrigeración está presente, la elección del líquido adecuado es clave en el mantenimiento del husillo. Vamos a ver el caso de un servomotor utilizado como motor torque que si dispone de circuito de refrigeración. En concreto se trata de un servomotor de la marca Baumüller utilizado como motor torque.
El problema del agua como refrigerante.
Utilizar el líquido de refrigeración adecuado a cada servomotor es clave en su mantenimiento. Las especificaciones técnicas de cada motor indican el producto adecuado. El uso de agua como refrigerante puede dañar las carcasas y conductos de refrigeración. Si el material de construcción es hierro, puede llegar a oxidar, y en el caso del aluminio corroer el material. Esta degradación genera un barro que acaba por obstruir los conductos de refrigeración del servomotor.
En el caso de este servomotor Baumüller que tiene la carcasa de aluminio, el uso de agua como refrigerante ha dañado los conductos debido a la corrosión del material. Por otro lado, no solamente daña los conductos en sí mismos, sino todas las superficies en contacto con el líquido. Se han llegado a producir fugas que han afectado al bobinado, al entrar en contacto con el líquido de refrigeración. Como consecuencia la solución pasa por tener que extraer el estátor de la camisa para realizar un nuevo bobinado.
En la imagen podemos observar toda la reconstrucción del bobinado del estátor.
El líquido de refrigeración adecuado.
Por todo esto, como os decíamos, la elección del líquido de refrigeración adecuado es clave. Desde GDM os recomendamos el uso de COOL-CORE READY PLUS de la marca MOTOREX. Este producto es usado como refrigerante y además como agente anticorrosivo en los sistemas de refrigeración del husillo. Este líquido ofrece una protección contra la corrosión a largo plazo en el motor. En consecuencia, una acción de mantenimiento del motor que evitará posibles averías.
Una vez desmontado el motor se le realiza una puesta a punto de mantenimiento preventivo del resto de elementos como por ejemplo los rodamientos. Siempre, en todas las intervenciones por mantenimiento correctivo, se aprovecha para realizar labores preventivas sobre el dispositivo de forma que podamos evitar otras averías futuras.
Después el servomotor pasará por nuestro departamento de control check para verificar la reparación. De esta forma podremos realizar la entrega final con todas las garantías. Todas nuestras reparaciones pasan por este protocolo de control que garantiza el mejor acabado posible.
Recordad el mensaje que siempre os hacemos llegar, mejor prevenir que llegar a la avería. Si tienes dudas sobre el tema escríbenos desde ESTE ENLACE.
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