La gama de modelos Simodrive 611 de Siemens están muy extendidos en el mundo de la maquinaria CNC. Son equipos modulares en los que la etapa de potencia y el control son intercambiables de forma independiente, lo cual les otorga una gran versatilidad y adaptabilidad.
Vamos a ver los avisos que este dispositivo nos lanza para indicarnos la necesidad de un mantenimiento correctivo sobre el aparato.
Alertas de los dispositivos Simodrive 611.
Las alarmas más frecuentes que nos podemos encontrar en estos drivers son:
- 300039 “Error durante la identificación de la unidad de potencia”.
- 300500 “Error en arranque”.
- 300501 “Vigilancia de intensidad máxima”.
- 300607 “Regulador de intensidad a tope”.
Todas estas averías podrían haber sido evitadas si se hubiera realizado un mantenimiento preventivo a tiempo. De esta forma podremos evitar que nuestra línea de producción tenga paradas inesperadas e indeseadas. Insistimos muchas veces en este punto, el mantenimiento preventivo es un proceso de ahorro, no un coste. Y solamente aporta beneficios a la empresa.
Puede llegar a ocurrir que, por no realizar el mencionado mantenimiento preventivo, los componentes del equipo o sus placas acaben muy dañados dificultando enormemente su reparación. Si se llega a esta situación, la única solución es la sustitución del equipo, lo cual es un sobrecoste respecto a una reparación o en el mejor de los casos una puesta a punto.
El proceso de mantenimiento.
El primer paso en el mantenimiento preventivo de modelos Simodrive 611 que se realiza en GDM es una profunda limpieza de placas electrónicas. El motivo es que este proceso evitara problemas derivados de la corrosión por elementos químicos del ambiente que se van depositando en ellas (grasas, aceites, polvos metálicos, humedad, etc…). Esta limpieza es muy importante ya que evitaremos posibles cortocircuitos o pérdidas de aislamiento que se pudiesen dar debido a estos elementos.
Una vez que se tiene el equipo limpio se procede al cambio de componentes. Nos centraremos en aquellos que por su composición química tienen una durabilidad limitada en cuanto al número de horas de trabajo y la temperatura que soportan. También se cambian los componentes opto-electrónicos que por su naturaleza tienen un desgaste por horas de trabajo.
Otro “foco” de averías en los drivers es el sistema de ventilación y refrigeración de los mismos. La clave está en que un sobrecalentamiento del equipo puede provocar daños en los componentes que en muchas ocasiones son irreversibles. Por todo ello es importante que en el mantenimiento preventivo se realice un cambio de componentes de refrigeración, una limpieza de disipadores y cambiar la pasta de disipación térmica.
Si disponéis de este tipo de equipos y necesitáis una valoración más en profundidad, no dudéis en escribirnos desde ESTE FORMULARIO.